jueves, 29 de octubre de 2009

Los Beneficios del Coaching

Roberto es un ejecutivo valorado por su empresa. Su área logra resultados económicos y sus indices de satisfacción al cliente son buenos, supera sus metas presupuestales, pero tiene serios problemas interpersonales. Su personal se siente presionado y desmotivado.



Las personas sienten que a Roberto solo le importan las metas y que ellas son un medio para lograr sus objetivos. Roberto presiona a su personal para que trabaje 11 horas diarias como él. Nunca los reconoce positivamente, pero sí frecuentemente sus errores.



La vida personal de Roberto es un desastre: ve poco a su familia y trabaja fines de semana para escapar de sus problemas personales, creando así un círculo vicioso que le genera mayor infelicidad. Si usted fuera el gerente de Roberto, ¿qué haría para ayudarlo?



Hay tres posibilidades. Algunos gerentes no se complicarían, total, Roberto produce resultados económicos. Otros, más humanos y preocupados por el clima laboral, hablarían con Roberto para darle consejos. Podrían hacer que lo evaluaran sus pares, jefes y colegas para tener una retroalimentación de 360 grados que le ayude a tomar conciencia de sus problemas. La tercera estrategia es usar coaching con Roberto.



En el coaching también se puede usar la retroalimentación de 360 grados, pero el gerente no le dice cómo mejorar y no le da consejos. El gerente le muestra los resultados e inicia una sesión de preguntas que guían a Roberto a descubrir sus fortalezas y oportunidades de mejora. A cosechar de los errores.



Además, Roberto decide qué quiere priorizar. En el coaching el gerente asume una actitud propositiva con respecto a Roberto. No lo ve como una persona con problemas, sino como un ejecutivo con enorme potencial capaz de ser una mejor persona y profesional. A nadie le gusta que le digan nada sobre sus problemas. A nadie le gusta recibir críticas y que le digan lo que tiene que hacer para arreglar su vida y su profesión.



Es mucho más poderoso que uno mismo encuentre sus oportunidades de mejora y deduzca sus propias soluciones y retos. Todos tenemos un maravilloso potencial interior con respuestas y sabiduría; sin embargo, por la velocidad con que vivimos o porque no hemos tenido la oportunidad de verbalizar las soluciones, no mejoramos. El coaching ayuda a descubrir “la lección correcta” en cada situación



El coaching ayuda, a través de las preguntas, a sacar el potencial de sabiduría interior de las personas. Si recogemos agua de la orilla del mar la veremos turbia. Pero si esperamos pacientemente, la arena se asentará en el fondo y se verá el agua cristalina.



El coaching es un proceso lento que, con paciencia, permite que la propia persona deje de lado sus aspectos negativos y pueda ver el agua cristalina de su enorme potencial profesional. Existen dos tipos de coaching. El formal, que normalmente se hace con un coach externo contratado para tener sesiones en periodos de 3 a 6 meses con diferentes ejecutivos. El otro tipo es el informal, que normalmente se hace con un coach interno para casos específicos como ayudar a Roberto a mejorar.



¿Es efectivo el coaching?



Dato: En un artículo publicado por Karlin Sloan, coach profesional en muchas empresas internacionales, comenta que, en promedio, el coaching obtiene 5.7 veces más beneficios que la inversión involucrada en hacerlo. Aproximadamente 40% de las empresas del Fortune 500 usan esta estrategia.



Según Sloan, la empresa Capital One invierte 5 millones anuales en coaching y ha encontrado que por cada gerente que tiene un coach, mejora el desempeño de nueve personas en la organización.



Un consejo final, si piensa implementar un programa de coaching, no lo enfoque como una estrategia para resolver problemas, enfóquelo como un privilegio que la empresa da a sus ejecutivos y gerentes para que sean mejores profesionales y, sobre todo, seres humanos más realizados y felices.



Adaptado de David Fischman

miembro de Beyond Leadership Group

viernes, 23 de octubre de 2009

Innovación: te autotransformas o te transforman. Tú decides



La innovación se configura así como el oxígeno necesario para la supervivencia de cualquier entidad moderna.



No existe mercado ni negocio que no haya vivido cambios espectaculares en los últimos 5 años. Con sectores abarrotados y necesidades de clientes saturadas, el “más de lo mismo” ya no sirve. No es suficiente para vivir. Desgraciadamente tampoco sirve el “más de lo mismo pero mejor”. Las estrategias de eficiencia, de “exprimir el limón” ya no sirven como antes. Sin innovación en productos, procesos, gestión y negocios, no hay clientes, no hay empresa, no hay futuro.



Hoy día una tecnología sustituye a otra o una empresa toma el lugar de otra en los mercados con extraordinaria rapidez. Cuando una tecnología de producto, proceso o negocio sustituye a otra se produce con frecuencia una mortandad del 90% de las empresas cuyo producto o negocio ha sido sustituido por otro diferente. La innovación construye para unos pero destruye para otros. ¿En qué lado estás?, ¿transformas a otros o te transforman?



Estas son algunas de las claves que deben tenerse en cuenta:



- Innovar en nosotros mismos. Existen remedios, herramientas y métodos para innovar. Están ahí fuera y funcionan bien... pero la solución debe nacer principalmente desde dentro de nosotros mismos. Este es el problema central. Debemos innovar primero en nosotros mismos, en nuestro aprendizaje, en nuestro pensamiento y comportamiento. Nuestro potencial es ilimitado.



- Innovación estratégica. Aunque la palabra innovación no falta en ninguna estrategia de empresa, lo que hay detrás de dicha palabra, deja mucho que desear. A veces no hay plan de innovación, ni recursos asignados ni una cartera de proyectos. Otras veces se sigue potenciando mucho la innovación de procesos, que no tiene el poder de introducirnos en nuevos mercados como la innovación de producto. La estrategia y la innovación van juntas. Invita nuevos cerebros a que aporten en tu Planeación Estratégica.



- La innovación sistemática. Aunque el talento innovador es escaso, se puede sistematizar la innovación con herramientas con base de conocimiento para hacerlo de forma efectiva y veloz. La innovación ya no es un proceso de azar. Existen herramientas que guían paso a paso a un equipo en el proceso de innovar en producto, formular problemas, ayudan a superar conflictos técnicos y permiten anticipar futuras evoluciones tecnológicas. Podemos y debemos innovar en la forma de innovar.



- La dimensión humanística de la innovación se deja en un 2º plano, pero la innovación genera y destruye competencias. La innovación genera temor, requiere gestionar la incertidumbre, potenciar la autoconfianza, mantenemos humildes, una actitud positiva, lograr el compromiso y gestionar la emocionalidad de forma hábil. La creatividad no va ligada al saber. Muchos expertos no son creativos. Estos factores culturales, emocionales, actitudinales y relacionales no podemos dejarlos al azar o considerar que no existen. Debemos innovar en personas, su potencial es ilimitado.



- La innovación se impide o se potencia desde la Dirección. La innovación suele ser abortada consciente o inconscientemente por los que detentan el poder y que evitan que se cuestionen hábitos y “verdades indiscutibles”. Nos cuesta desaprender, olvidar y “bajarnos del burro” incluso estando el burro dando muestras de fuertes debilidades o estando muerto desde hace bastante tiempo. Necesitamos institucionalizar una “desobediencia” organizada. La innovación es una prioridad para las buenas direcciones de empresas. Se humilde, no lo sabes todo, acéptalo.



Existen las herramientas para ayudar en la dimensión estratégica, metodológica y humanística de la innovación si el impulso es liderado por la Dirección. La función de la Dirección hoy ya no está ligada al control sino al acompañamiento por los caminos de la innovación.



La innovación se convertirá en crecimiento y riqueza si se gestionan los 3 puntos débiles; que la innovación sea de verdad una estrategia de nuestra organización, que se fortalezca la innovación sistemática más allá de las normas de la Dirección y de que se potencie la vertiente humanística de la innovación. Las herramientas y la metodología ya existen y funcionan, úsalas.



El problema no es el este de Europa o China. Son toques de atención para quienes quieran seguir haciendo “más de lo mismo”, sigan haciendo “chinadas” o se queden con los brazos cruzados, disfrutando de "la comarca". La cuestión esencial es nuestra decisión y no posponer buscando momentos mágicos.



Sólo conservamos lo que renovamos. Lo que permanece igual, se acaba por perder. O te autotransformas o te transforman. Transformación habrá, hecha por ti o por otros. Tú decides en que lado estás.



Reflexión: ¿Cuántas cosas nuevas has intentado hacer en los últimos meses? Einstein nos dice que “estupidez es hacer lo mismo y esperar resultados distintos.”



¿Cuántas cosas distintas hemos pensado, planificado y hecho recientemente?, ¿cuántas cosas diferentes vamos a pensar y hacer?, ¿Qué vas a hacer HOY diferente para alimentar tus sueños? tú decides.
¡SOLO LO QUE ESTÁ MUERTO NO CAMBIA, Y TÚ ESTÁS VIVO!



Cambia.


Pero empieza poco a poco, porque la dirección es más importante que la velocidad.
Siéntate en otra silla, al otro lado de la mesa.
Más adelante, cambia de mesa.


Cuando salgas, procura andar por el otro lado de la calle. Después cambia el camino, anda tranquilamente por otras calles, observando con atención los lugares por donde pasas.
Toma otros autobuses. Cambia por un tiempo el estilo de las ropas; da los zapatos viejos y procura andar descalzo durante algunos días, aunque sea dentro de casa.
Dedica una tarde entera a pasear libremente, oír el canto de los pájaros o el ruido de los coches.


Abre y cierra los cajones y puertas con la mano izquierda.
Duerme en el otro lado de la cama. Después, procura dormir en otras camas.
Mira otros programas de TV, lee otros libros, vive otros romances aunque sea en tu imaginación.
Duerme más tarde. Duerme más temprano.
Aprende una palabra nueva cada día.


Come un poco menos, come un poco más, come diferente: escoge nuevas salsas, nuevos colores, cosas que nunca te atreviste a probar.
Almuerza en otros lugares, ve a otros restaurantes, toma otro tipo de bebida, compra pan en otra panadería.
Almuerza más temprano, cena más tarde, o viceversa.


Prueba lo nuevo cada día: el nuevo lado, el nuevo método, el nuevo sabor, la nueva manera de hacer algo, el nuevo placer, la nueva posición.
Elige otro mercado, otra marca de jabón, otra pasta de dientes.
Toma tu baño en otros horarios.
Usa bolígrafos de otros colores.
Ve a pasear por otros lugares.


Ama cada vez más, de maneras diferentes. Aun cuando pienses que la otra persona puede asustarse, sugiere lo que siempre soñaste hacer, a la hora del sexo.
Cambia de bolso, de cartera, de maletas, compra nuevos lentes, escribe otras poesías.
Abre una cuenta en otro banco. Frecuenta otros cines, otros peluqueros, otros teatros, visita nuevos museos.


¡Cambia!

Y piensa seriamente en conseguir otro empleo, una nueva ocupación, un trabajo más parecido a lo que esperas de la vida, más digno, más humano.
Si no encuentras razones para ser libre, invéntalas: sé creativo.
Y aprovecha para hacer un viaje modesto pero largo, y si es posible, sin destino.


Experimenta cosas nuevas. Cambia nuevamente. Cambia de nuevo. Prueba otra vez.
Conocerás ciertamente cosas mejores y cosas peores de las ya conocidas, pero no es eso lo que importa.
Lo más importante es el cambio, el movimiento, el dinamismo, la energía.

Autor Desconocido



¡SOLO LO QUE ESTÁ MUERTO NO CAMBIA, Y TÚ ESTÁS VIVO!

jueves, 22 de octubre de 2009

La Lección del Fuego
Un hombre que regularme asistía a un grupo dejó de participar en sus actividades sin previo aviso.
Después de algunas semanas, el líder del grupo decidió visitarlo. Era una noche muy fría.
Encontró al hombre en su casa, solo, sentado frente a un hogar donde ardía un fuego brillante y acogedor. Anticipando la razón de su visita el hombre dio la bienvenida al líder, lo invitó a sentarse junto al fuego y permaneció quieto, esperando.
El líder aceptó la invitación y, sin decir palabra, se sentó confortablemente.
En silencio contemplaba la danza de las llamas en torno de las brasas de leño que ardían.
Al cabo de algunos minutos, siempre en silencio, el líder seleccionó una de ellas, la más incandescente de todas y la separó del resto de las brazas ardientes. Se acomodó en su silla y permaneció callado.
El anfitrión prestaba atención a cada uno de sus actos con fascinación y quietud.
Observó así como la llama de la brasa solitaria disminuía hasta apegarse de una vez.
En poco tiempo, lo que antes era una fiesta de luz y calor ahora no pasaba de ser un carbón cubierto de cenizas.
Ninguna palabra fue dicha desde el protocolar saludo inicial entre los dos hombres.
El líder se incorporó aprestándose a salir. Tomó entonces el trozo de carbón colocándolo nuevamente en medio del ardiente fuego. Casi de inmediato volvió a encenderse alimentado por la luz y el calor de las brasas ardientes en torno a él.
Ya en la puerta y antes de que el líder se retirará dijo el anfitrión;
- Gracias por tu visita y el hermoso mensaje; muy pronto estaré de regreso junto al grupo. Dios te bendiga.

Recuerda que como líder-coach eres responsable de "soplar las brasas" y colaborar para mantener encendida la llama de cada uno de tus colaboradores promoviendo la unión para que el fuego sea fuerte, eficaz y duradero.

miércoles, 21 de octubre de 2009

Douglas McGregor desarrolló en "El lado humano de las organizaciones" (1960) las siguientes teorías referente al estilo de mando de los directivos:

Teoría X
El ser humano ordinario siente una repugnancia intrínseca hacia el trabajo y lo evitará siempre que pueda.
Debido a esta tendencia humana al rehuir el trabajo la mayor parte de las personas tiene que ser obligadas a trabajar por la fuerza, controladas, dirigidas y amenazadas con castigos para que desarrollen el esfuerzo adecuado a la realización de los objetivos de la organización.
El ser humano común prefiere que lo dirijan quiere soslayar responsabilidades, tiene relativamente poca ambición y desea más que nada su seguridad.
Teoría Y
El desarrollo del esfuerzo físico y mental en el trabajo es tan natural como el juego o el descanso. Al ser humano común no le disgusta esencialmente trabajar.
El control externo y la amenaza de castigo no son los únicos medios de encauzar el esfuerzo humano hacia los objetivos de la organización, el hombre debe dirigirse y controlarse a sí mismo en servicio de los objetivos a cuya realización se compromete.
Se compromete a la realización de los objetivos de la empresa por las compensaciones asociadas con su logro.
El ser humano ordinario se habitúa a buscar responsabilidades. La falta de ambición y la insistencia en la seguridad son, generalmente, consecuencias de la misma experiencia y no características esencialmente humanas.
La capacidad de desarrollar en grado relativamente alto la imaginación, el ingenio y la capacidad creadora para resolver los problemas de la organización, es característica de grandes sectores de la población.
En las condiciones actuales de la vida industrial las potencialidades intelectuales del ser humano están siendo utilizadas sólo en parte.
¿Qué teoría es más acertada?
Aunque la Teoría X, está todavía extendida por muchos directivos, se considera una forma de pensar obsoleta.

McGregor propone la adopción de la Teoría Y para aumentar la motivación de los empleados.

Donald Morton ("Applying theory Y to library management") sugiere que la Teoría Y es efectiva con trabajadores con ciertos niveles de conocimientos que los llevan más allá de los dos primeros niveles de la Jerarquía de Maslow, y que la Teoría X es frecuentemente más efectiva con el personal que realiza trabajos manuales o rutinarios. Pero finalmente me interesa tu opinión, ¿qué te dice la experiencia directiva? ¿Tus colaboradores cómo son? ¿Qué te ha funcionado y qué no? ¿Lo comentamos? Buen día y... te pregunto... ¿Qué vas a hacer HOY diferente para alimentar tus sueño?

lunes, 19 de octubre de 2009

Sobre las crisis y la postergación I
En este momento tienes la opción de leer 5 minutos y seguir creciendo o posponer para un mejor momento la lectura de este artículo.

Seguramente algunos de nuestros líderes siguen planeando y esperando la mejor oportunidad para atacar el problema; “hasta tener más datos…”, “esperando el momento oportuno…”, “hasta que las condiciones se den… (sic)”, y entonces, en un momento de “iluminación” ¡tener el plan perfecto!… posponiendo… posponiendo… posponiendo… algunos problemas desaparecen momentáneamente para re aparecer con mas fuerza en mas y diferentes ubicaciones, y con nuestra “ignorancia sistémica” decir; ”Ahh, este ya es otro problema, veamos como lo resolvemos… “ y ¡empezamos de nuevo con el ciclo de la postergación!
Las crisis, los virus, los gérmenes, los problemas en general, no tienen planes perfectos, solo acciones constantes para sobrevivir haciéndose más fuertes y mejores, acosta de nuestra inacción, indolencia y capacidad infinita de posponer lo que tenemos que hacer”.
La postergación es una amputación, nos disminuye y minimiza, aplazar las cosas mina nuestra auto imagen. Además, el incumplimiento reiterado de los compromisos puede ser el detonante de una pérdida de empleo, de una ruptura afectiva o de un perjuicio económico y siempre a la larga una considerable disminución de la Calidad de Vida del postergador. Diferir el comienzo de una tarea (postergación), es una práctica que limita nuestra capacidad de logro, obstaculiza el alcance de nuestros objetivos personales y profesionales.”
Donald Marquis dijo que la postergación era "el arte de estar al día con el ayer". A esto yo le agregaría, "y de evitar el hoy". Funciona de la siguiente manera. Tú sabes que hay ciertas cosas que quieres hacer, no porque otros te lo hayan ordenado, sino porque las has elegido deliberadamente. Sin embargo muchas de ellas se quedan sin hacer, a pesar de lo mucho que te digas a ti mismo que las harás. Decidirte a hacer algo en el futuro, algo que podrías hacer ahora, es un sustituto muy aceptable del hecho de hacerlo realmente, y te permite engañarte a ti mismo no enfrentándote con el hecho de que en realidad ésta es una componenda y que no estás haciendo lo que te propusiste hacer.
Es un sistema muy útil que funciona más o menos así: "Yo sé que debo hacer aquello, pero en realidad tengo miedo de hacerlo mal, o que no me gustará hacerlo. Entonces me digo a mí mismo que lo haré en el futuro, y así no tengo que admitirme a mí mismo que no lo voy a hacer. Y me es más fácil aceptarme a mí mismo de esta manera". Éste es el tipo de razonamiento conveniente pero falaz y engañoso que puedes poner en juego cuando te enfrentas con algo que tienes que hacer, en lo cual tienes que comprometerte o que te resulta difícil, desagradable, que existe el riesgo de fallar.
Tú no eres necesariamente lo que dices. Tu comportamiento es un barómetro mucho más adecuado para medir tu valor. Lo que haces en tus momentos presentes es el único indicador de lo que eres como persona, Emerson escribió una vez lo siguiente:
“No digas cosas. Lo que eres, relumbra sobre ti mientras lo haces, y atrona con tal fuerza que no puedo oír lo que alegas en su contra.”
La próxima vez que digas que harás algo, a sabiendas de que no lo harás, recuerda esas palabras.
“Cuando a ti se te ocurra la solución ideal, alguien habrá resuelto ya el problema”
LEY DE LA IDEA GENIAL
“Un buen plan es mejor hoy que un plan perfecto mañana”
LEY DE PATTON
Pospondré mis sugerencias para solucionar la postergación hasta la próxima ocasión.
Nuevos paradigmas del conocimiento y
el desarrollo humano, una perspectiva empresarial.

Deberíamos estar verdaderamente sorprendidos por lo que está pasando… Y si no me crees, lee las siguientes líneas.
En los últimos años se han generado una serie de cambios verdaderamente impresionantes, tanto de orden tecnológico como de desarrollo personal y profesional. Estos cambios cambian de manera radical la manera en que debemos plantearnos nuestro crecimiento y desarrollo personal y profesional…
Por mencionar sólo algunos ejemplos en el orden tecnológico, actualmente ya desaparecieron formatos de reproducción de películas como VHS y Beta, sustituidos por los famosos DVD, así como el formato de audiocassettes por el Disco Compacto (CD), y ni hablar de los dispositivos USB portátiles o de los BlackBerry, Palm, iPhone o iPod Touch o las nuevas cámaras de Sony que toman la fotografía al momento de sonreír. Increíble, ¿no? Estas tecnologías traen grandes adelantos que simplifican y facilitan, de alguna manera, la vida de los usuarios.
Por otro lado, en lo que se refiere al ámbito de la biología, se han realizado una serie de descubrimientos acerca del funcionamiento de nuestro cerebro que también asombrarían a más de uno, y esto es sólo el principio. Al respecto podernos mencionar que a principio de las décadas de los 50 y 60, los científicos estimaban la capacidad utilizada de nuestro cerebro en 50%; para los 70, el cálculo se situó en 10%; en los 80, y ante los nuevos descubrimientos que se estaban realizando, dicho porcentaje se ubicó en 1%. Ahora, en estos momentos (primer década del siglo XXI), la cifra es verdaderamente para sorprender a muchos, ya que se afirma que estamos utilizando apenas el 0.01% de nuestra verdadera capacidad cerebral. Sinceramente no se que tan cierta sea esta cifra, pero lo que si me queda claro es que estamos sub-utilizando nuestro potencial cerebral, ¿no lo crees tú así?
En esta época llena de cambios y donde nada permanece estático, la tecnología y el conocimiento humano se desarrollan de manera constante. Se sabe que este último, hasta antes del fin del siglo XX, se venía duplicando aproximadamente cada cuatro años y se estima que en estos momentos, de acuerdo con los científicos, dicho conocimiento se está duplicando cada 20 meses y cerca de 2010, lo hará cada 180 días.
A partir de hoy y en los próximos años la evolución tecnológica será aún mayor, más intensa y provocará cuantiosos cambios en nuestra forma de vida, ya que no hay quien impida ese proceso de transformación. En este caso, lo mejor que podemos hacer es adaptarnos y organizar esas transformaciones en nuestra estructura interna, en nuestra mente, así como en nuestras relaciones empresariales con el mercado en el que estemos inmersos.
Las organizaciones más inteligentes cambiarán antes, asegurándose así un lugar en el futuro y serán ellas quienes liderarán el mercado (piensa nada más en lo que están haciendo empresas como Microsoft, Yahoo, Google o Apple). Naturalmente, las que no cambien no lo tendrán garantizado.

Estas son algunas opciones que podemos desarrollar:
• Renovarnos constantemente. Tanto en nuestra estructura empresarial como en nuestro desarrollo personal, liderando nuestra organización, colaborando y aportando a la empresa en la cual prestamos nuestros servicios, por medio de la actualización permanente.
• Introducir novedades en nuestra vida. No podemos continuar haciendo siempre lo mismo, debemos buscar una evolución tanto personal, como profesional.
• Mejorar y crecer como seres humanos. Actualmente se están dando a conocer diversas tecnologías que potencian nuestro cerebro y nuestra mente. Si aprovechamos en nuestro favor estas tecnologías del desarrollo humano podremos continuar siendo líderes de nuestra propia vida y en consecuencia, de las organizaciones de las cuales formamos parte.
• Saber crear nuestro propio futuro. Hace muchos años, a fines de la década de los 50, en una importante universidad estadounidense le preguntaron a los egresados de cierta generación si tenían un plan de vida, es decir, si tenían definido lo que querían hacer con su vida y si esos propósitos o metas los tenían por escrito. Sólo 3% contestó afirmativamente; 20 años después volvieron a encuestar a los mismos egresados y la información que obtuvieron los investigadores fue sorprendente. Ese 3% por ciento que sí había definido su plan de vida por escrito valía, económicamente hablando, más que el 97 por ciento restante, pero no sólo eso, sino que también gozaban de mejor salud y sobre todo, eran felices con lo que hacían.
Te pregunto: ¿sabes cuál es tu misión en este planeta? ¿Tienes definido lo que quieres en la vida? ¿Tiene metas y objetivos por escrito? ¿Qué vas a hacer hoy diferente para alimentar tus sueños?
Si respondes afirmativamente, quiere decir que perteneces a ese selecto 3 por ciento de personas que sí consiguen el éxito en la vida. ¡Te felicito! En caso contrario, estás a tiempo de hacer conciencia de su situación actual y actuar en consecuencia.
También hay que tener presente que el éxito en el pasado no garantiza el éxito en el futuro. No hay que dormirnos en nuestros laureles. Tengamos siempre como fuente de entusiasmo y motivación el cambio y no la inmovilidad. Debemos estar siempre abiertos a las innovaciones, a la adquisición de nuevos conocimientos, capacidades y habilidades personales. Hoy como nunca antes es tiempo de invertir en nosotros mismos en nuestro desarrollo y el de nuestros colaboradores.
Esta apertura al cambio deberá manifestarse en nuestras creencias actuales, las cuales posiblemente sean limitantes en lugar de impulsoras, y si ese fuera el caso, hay que polarizarlas o sustituirlas por otras que nos impulsen y motiven.
Actualmente se sabe que el conocimiento es y seguirá siendo la base de la creación de la riqueza, a diferencia del paradigma anterior, en donde la tierra, el trabajo y el capital eran las fuentes de la riqueza.
Analiza; ¿Qué conocimientos te limitan? ¡Elimínalos, desaprende! ¿Cuáles te impulsan? ¡Adquiérelos, potencialízalos!

¡MEDITA, ANALIZA, PLANEA, HAS CAMBIOS Y ACTUA, ACTUA, ACTUA!

Te pregunto:
¿Qué vas a hacer hoy diferente para alimentar tus sueños?

“Nuestros sueños moldean nuestros objetivos y nuestros objetivos moldean nuestra vida. El coach nos ayuda a alcanzar nuestros objetivos.”